Néstor Maldonado y Horacio Calero, dos puertorriqueños en la diáspora, se conocieron trabajando en un supermercado en Ocala, Florida, uno en la parte de frutas y vegetales y el otro como cajero. Luego de varios años, ambos tomaron la decisión de regresar a Puerto Rico dónde sus carreras los llevaron en distintas direcciones. Mientras Néstor se desempeñó en la industria agrícola, Horacio trabajó para la banca.
Sin embargo, cuando a Néstor le surgió la oportunidad de emprender un proyecto empresarial para producir carne de cerdo local, no dudó en presentarle el proyecto a Horacio, quien se interesó rápidamente. Juntos darían forma a su visión de suplir al mercado local carne de cerdo de la mejor calidad; siempre fresca y nunca congelada.
Nace Empresas La Ceba en Corozal
En el 2008 comenzaron su proyecto de producción con la misión de ofrecer la mejor carne de cerdo en Puerto Rico y el Caribe, respetando las regulaciones de producción y del ambiente. Así nació Empresas La Ceba en el barrio Magueyes en Corozal, conocido por muchos como “el barrio olvidado.” Para Néstor y Horacio es un orgullo tener su finca en este lugar, donde emplean a 10 trabajadores, siendo la principal fuente de empleo en el barrio. Contribuir al bienestar de estas 10 familias, además de las de otros 7 trabajadores en la planta de procesamiento, llena de mucha satisfacción a este equipo de empresarios. Este orgullo también se lo transmiten a sus empleados quiénes con dedicación llevan a cabo sus respectivos roles en las áreas de crianza, producción, procesamiento y distribución de la carne de cerdo.
Descubrieron su potencial de crecimiento en GVA
Luego de cerca de 10 años operando Empresas La Ceba, Néstor y Horacio reconocían que su negocio había llegado a un punto de madurez que les requería reevaluar su operación para trazar una nueva ruta de crecimiento. Cuando recibieron la recomendación de participar del Guayacán Venture Accelerator (GVA), no dudaron en aceptar el reto.
Horacio recuerda que uno de los primeros aprendizajes del programa fue la importancia de establecer una estructura operacional que les permitiera delegar algunas tareas de la finca para ellos poder enfocarse en el crecimiento de la empresa. “En el GVA nos enseñaron que crecer este negocio es un trabajo que requiere dedicación full-time, uno de los primeros cambios que implementamos fue la contratación de nuevos gerentes de operación que pudieran supervisar los trabajos diarios,” explicó.
Además, el GVA los hizo plantearse la posibilidad de exportar su producto fuera de Puerto Rico por lo que han trazado un plan de expansión a largo plazo que contempla vender los productos de La Ceba en Estados Unidos e Islas Vírgenes.
Durante este proceso, han enfrentado grandes retos como lo es la falta de educación de algunos consumidores y cadenas de supermercado sobre el alto nivel de calidad de la producción de alimentos locales. “La carne que llega de afuera es de una categoría menor a la que producimos aquí en Puerto Rico. Aquí se quedan los mejores productos y lo mismo pasa en el extranjero,” comentó Néstor, quien aseguró que las carnes importadas pueden llegar a ser hasta de tercera y cuarta categoría, mientras que el producto local es de primer nivel. “Nosotros competimos con productos importados que no cumplen con los altos estándares de calidad de nuestra producción local,” añadió el empresario.
Su razón para dar al Guayacán Giving Day
“Guayacán nos enseñó que, para crecer, tenemos que estar dispuestos a mirar fuera de la caja y pensar en grande. Muchas veces los empresarios nos encontramos trabajando en el día a día de nuestros negocios y no nos da el tiempo para ver más allá de eso. Guayacán te reta a expandir tus posibilidades y te da una visión que te permite analizar tu empresa desde otra perspectiva. Todo emprendedor puede beneficiarse de estos programas, desde los que sólo están comenzando hasta los que tienen empresas establecidas como la nuestra”.
–Horacio Calero, GVA
“Guayacán es una organización local que nos permite acceso a recursos de calibre global, incluyendo profesores de las mejores universidades del mundo. ¡Los tenemos aquí en el patio de nuestra casa! Para empresas como la nuestra, es mucho más accesible que tener que viajar fuera de Puerto Rico. En el programa te enseñan muchísimo, con ellos descubrimos que muchas de las cosas que pensábamos que estábamos haciendo bien, realmente no lo estaban y nos dieron las herramientas para cambiarlas. Tenemos que apoyar a Guayacán para que puedan ayudar a otros emprendedores puertorriqueños a estructurar y crecer sus negocios, como lo hicieron con nosotros”.
–Néstor Maldonado, GVA