Muchos de los que quieren montar un negocio sueñan con el nombre que le pondrán, con un rótulo bien chulo, con un website bien cool y con la idea de sentirse un empresario. Eso es emocionante, sin duda. Pero ¿qué es lo que ofreces? ¿hay gente dispuesta a pagar por eso? ¿Quién?
Imagina entonces unos jóvenes tratando de montar una compañía de construcción que sea atractiva, y que tenga posibilidades de éxito. “La visión que tienes de tu negocio después que pasas por Guayacán es una bien distinta a la que tenías antes de entrar al programa.” Dice Edgardo Romero de ERCEngineering. Él y sus socios aprendieron a preparar un plan de negocio, a pensar más allá de lo inmediato, de lo obvio. Ahora esta compañía de Manatí que se dedica a demolición, construcción y remodelación no solo tiene herramientas para tumbar o edificar estructuras. También tiene herramientas para resistir y mantenerse a flote cuando algo no sale como esperado.
Ahora saben cómo manejar sus recursos y presupuesto, pero también entienden que tienen una misión. Quieren enseñar con el ejemplo, que se puede diseñar y construir de forma sustentable, sin crear un problema con el que tendrían que lidiar las próximas generaciones.
¡Únete a #DarParaImpulsar empresas sólidas como la de Edgardo!
